Ayer lunes los cuatro apagafuegos del 43 Grupo del Ejército del Aire continuaron con las labores de extinción del incendio forestal que afecta al distrito de Leiria en Portugal.
A bordo de cada avión anfibio dos pilotos y un mecánico de vuelo del Ejército del Aire totalizaron casi 27 horas luchando contra el fuego. En este periodo de tiempo efectuaron 117 descargas para lanzar sobre las llamas más de 700 toneladas de agua. Fue su segundo día de actividad en las labores de extinción de este terrible incendio que azota al país vecino.
Dos de los aviones han pernoctado en la Base Aérea de Matacán y los otros dos en la Base Aérea portuguesa de Monte Real. Hoy han vuelto a partir rumbo a la zona del incendio.
En su lucha contra el fuego colaboran con otros dos apagafuegos de la Sécurité Civile francesa y otros dos procedentes de Italia.
